Escrito por Rachele Cervaro y Gábor Kovács
Antes de viajar a Australia solemos pensar en la cantidad de horas que separan Europa de Oceanía, pero una vez allí lo que realmente sorprende es lo descomunal que es el país. Australia es tan grande que resulta difícil hacerse una idea sin echar un vistazo al mapa: puede caber Europa entera dentro de sus fronteras. Por eso, lo primero que hay que asumir es que no se puede ver todo en un solo viaje. Si pretendes hacerlo, acabarás pasando más tiempo en desplazamientos que disfrutando de los lugares. Lo ideal es centrarse en una región o ruta concreta y recorrerla con calma.
Muchos viajeros sueñan también con vivir una temporada en Australia. Y no es para menos: los sueldos son muy altos y eso permite, en poco tiempo, ahorrar lo suficiente para organizar un viaje largo por el país o incluso dar la vuelta al mundo. Si estás planeando tu primera experiencia en este rincón del planeta, aquí tienes nuestra mini guía para viajar a Australia, con información práctica y consejos que te ayudarán a organizar mejor tu aventura.
Cómo viajar por Australia
Australia funciona casi como un continente. Llegar hasta allí ya es una odisea: el vuelo desde España dura al menos 24 horas con escalas incluidas. Pero el verdadero reto empieza cuando tienes que organizar tu ruta dentro del país. Aunque hay muchas conexiones aéreas internas, las distancias entre ciudades son enormes, incluso en zonas pobladas como la costa este.
Lo más habitual es concentrarse en la costa, especialmente entre Sídney, Brisbane y Melbourne, donde hay muchas opciones para moverse en transporte público, alquilar un coche o incluso furgoneta. Las carreteras están en buen estado, hay alojamiento de todo tipo y resulta más fácil encontrar supermercados, gasolineras y señal de móvil.
Ahora bien, si lo que te atrae es el corazón de Australia, el famoso Outback, tienes que preparar el viaje con más detalle. Las distancias entre pueblos pueden superar fácilmente los 300 o 400 kilómetros, y en algunos tramos apenas encontrarás gasolineras o lugares habitados. En el interior del país es normal pasar horas sin cruzarte con otro coche, y la cobertura móvil es muy limitada o inexistente.
Por eso, si decides adentrarte en estas zonas remotas, conviene:
- Llevar bidones extra de agua y gasolina.
- Informar a alguien de confianza sobre tu itinerario.
- Revisar el coche antes de salir y llevar repuestos básicos.
- Consultar el estado de las carreteras (algunas se cierran por lluvias o incendios).
La recompensa, eso sí, es increíble: paisajes que parecen de otro planeta, cielos estrellados sin contaminación y el silencio más absoluto. Un lugar que se queda grabado en la memoria.
Requisitos para viajar a Australia
Si viajas con pasaporte español (o de cualquier otro país de la Unión Europea), no necesitas visado en el sentido tradicional para entrar como turista. Lo único que tienes que hacer es solicitar de forma online la autorización electrónica eVisitor, que se obtiene rellenando un formulario sencillo en la web del gobierno australiano. Es gratuita y, en la mayoría de los casos, se aprueba en pocos minutos.
Ahora bien, en algunos casos pueden pedirte información adicional. A Gábor, por ejemplo, le pasó: recibió una notificación para subir más datos antes de recibir la confirmación. Así que no dejes este trámite para el último momento, por si acaso.
Además del pasaporte en vigor y la eVisitor, hay otras cosas importantes que debes tener en cuenta:
- No puedes llevar productos de origen vegetal o animal sin declarar: nada de fruta, carne, semillas, ni siquiera bocadillos en la mochila.
- En el aeropuerto los controles son muy estrictos y, si llevas algo prohibido y no lo declaras, puedes enfrentarte a multas importantes.
- Si tienes dudas, lo mejor es declararlo todo. Incluso si has llevado productos sin darte cuenta, si los declaras no te pondrán problemas.
Australia es un país que se toma muy en serio su bioseguridad. Como está aislado geográficamente, no tienen muchas enfermedades ni plagas que sí existen en otras regiones del mundo, y hacen todo lo posible por mantenerlo así. Verás hasta alfombras desinfectantes en los aeropuertos o advertencias sobre el calzado si vienes de zonas rurales.
En resumen: el papeleo para entrar no es complicado, pero es importante leer bien todas las indicaciones y ser transparente con lo que llevas en la maleta.
Requisitos para vivir y trabajar en Australia
Ir a vivir en Australia es una idea que atrae a mucha gente, no solo por sus paisajes y calidad de vida, sino también porque los sueldos en Australia están entre los más altos del mundo. Sin embargo, conseguir un visado de trabajo no es tan sencillo como muchos piensan. Australia tiene una política migratoria muy estricta y da prioridad a perfiles profesionales específicos, normalmente aquellos que aparecen en la lista oficial de ocupaciones demandadas. Esa lista cambia cada cierto tiempo, así que lo mejor es consultar siempre la información actualizada en la página oficial del Departamento de Inmigración de Australia.
Una de las formas más accesibles de pasar una temporada en el país es a través de la Working Holiday Visa. Esta visa está pensada para jóvenes menores de 30 años y permite vivir en Australia durante un año, pudiendo trabajar durante seis meses para financiar el viaje. Desde 2017, España cuenta con 1500 plazas anuales, una mejora significativa frente a las 600 anteriores. Además, si cumples con ciertos requisitos (como trabajar durante un tiempo determinado en el campo o en zonas rurales), es posible solicitar una prórroga por un segundo año.
Esta opción es especialmente popular entre viajeros que quieren combinar la experiencia laboral con la exploración del país. Muchos trabajan unos meses en ciudades como Sídney o Melbourne, y luego se lanzan a recorrer la costa, visitar parques nacionales o incluso pasar un tiempo en el Outback. La clave es planificar bien y asegurarse de cumplir todos los requisitos de la visa.
⚠️ No viajes a Australia sin seguro de viaje 🛡️
Recorrer Australia sin un seguro de viaje es como lanzarse a la carretera del desierto del Outback sin revisar el depósito: puedes seguir adelante, pero cualquier imprevisto se convierte en un problema serio. Aunque Australia es un país moderno y seguro, también es un territorio enorme, con distancias inmensas, clima impredecible y muchas actividades al aire libre que conllevan cierto riesgo.
Durante nuestro viaje por este país lleno de naturaleza salvaje, ciudades vibrantes y rincones remotos, contar con un buen seguro nos permitió viajar con tranquilidad. Con Heymondo contratamos la cobertura directamente desde el móvil en cuestión de minutos, y tuvimos acceso a asistencia 24/7 desde la app. En un entorno donde puedes sufrir desde una torcedura haciendo senderismo en Blue Mountains hasta una picadura de medusa en Queensland o un cambio de planes por incendios forestales, llevar un seguro adaptado a Australia es casi obligatorio.
Si estás preparando tu viaje por Australia, puedes contratar aquí tu seguro Heymondo con este enlace y beneficiarte de un 5% de descuento exclusivo para lectores de Surfing the Planet. Heymondo además incluye ventajas específicas para quienes viajan en familia o practican actividades como surf, snorkel, senderismo o viajes en furgoneta por zonas poco pobladas.
La mejor época para viajar a Australia
Una de las cosas que más desconciertan al preparar el viaje es que no existe una sola mejor época para viajar a Australia. Todo depende de la zona que vayas a visitar. El país es tan grande que puedes pasar de un clima tropical a uno alpino en cuestión de horas de vuelo. Mientras en el norte puede haber tormentas tropicales en enero, en el sur puede hacer frío incluso en verano.
Nosotros viajamos durante el invierno austral (agosto) y fue una experiencia muy positiva. En lugares como Queensland, el clima era cálido y seco, perfecto para recorrer la costa y visitar parques naturales. En otras zonas, como las Blue Mountains, sí que encontramos temperaturas más frescas, pero nada extremo.
Muchos evitan viajar en verano austral (de diciembre a febrero) por varios motivos. En esa época los precios suben, hay más turismo interno, y en el norte las lluvias pueden llegar a cortar carreteras. Por eso, julio y agosto pueden ser meses ideales, especialmente si te interesa visitar la Gran Barrera de Coral o las regiones del norte sin sufrir el calor pegajoso ni las tormentas del verano tropical.
Y aunque vayas en temporada alta, lo cierto es que Australia no se siente saturada de turistas, ni siquiera en las zonas más visitadas. Las distancias juegan a favor del viajero: salvo en los principales puntos turísticos, no tendrás esa sensación de agobio que a veces ocurre en otros destinos más pequeños.
Seguridad
En cuanto a seguridad, Australia está entre los países más tranquilos del mundo. Las ciudades funcionan bien, hay un alto nivel de vida, y la sensación general es de orden y respeto. Nosotros mismos perdimos un móvil en el aparcamiento de un centro comercial y cuando volvimos horas más tarde, alguien lo había entregado en la recepción. Es el tipo de cosas que te hacen confiar en el entorno.
Ahora bien, eso no significa que no haya riesgos. En Australia la naturaleza es la que impone respeto, no tanto el entorno urbano. Hay que tener cuidado con varios elementos, sobre todo si planeas moverte por zonas más remotas:
- Evita conducir de noche en carreteras rurales. Los canguros suelen cruzarse en la carretera de forma imprevisible y los accidentes son muy frecuentes. Muchos seguros no cubren daños por choques con fauna salvaje después del atardecer.
- Infórmate antes de bañarte en playas, ríos o lagos. En el norte de Queensland, por ejemplo, hay presencia de medusas irukandji, extremadamente venenosas. Si ves un cartel que avisa de “stingers”, mejor elige otra playa o asegúrate de que haya redes protectoras.
- También hay zonas donde hay cocodrilos marinos. No es raro que en ciertas playas o ríos se prohíba el baño por seguridad. Y no olvidemos a los tiburones, presentes incluso en algunas playas cercanas a grandes ciudades.
- Por último, el interior del país alberga algunas de las serpientes y arañas más venenosas del mundo. Aunque los encuentros no son comunes, es importante revisar bien el calzado, la ropa o la tienda de campaña si estás de ruta por zonas naturales.
Diferencia horaria con Australia
Al ver en el mapa dónde está Australia, es fácil imaginar que la diferencia horaria con España es considerable. Dependiendo de la zona del país en la que te encuentres, hay entre 7 y 9 horas de diferencia con respecto a la península. Además, Australia cuenta con varios husos horarios internos, lo que puede complicar un poco más la organización de llamadas o reuniones si estás en contacto con familiares o amigos desde Europa. Si estás pensando en vivir en Australia, tendrás que acostumbrarte a organizar videollamadas a primera hora de la mañana o al final del día.
Idioma
El idioma oficial en Australia es el inglés, así que tanto si vas de viaje como si te planteas quedarte una temporada, es una excelente oportunidad para mejorar tu nivel. Es cierto que el acento australiano puede sonar extraño al principio, sobre todo en zonas rurales, pero con el paso de los días uno se adapta. En las grandes ciudades, la variedad de acentos es tan amplia como la mezcla cultural que hay, así que seguro que encuentras formas de practicar y aprender sin grandes dificultades.
WI-FI
Una de las cosas que más sorprende al llegar es que el acceso gratuito a internet no está tan extendido como en otros países. En muchos casos, solo encontrarás wifi gratuito en cafeterías de cadenas como McDonald’s o en algunas bibliotecas públicas. En los hostales, lo habitual es que cobren entre 5 y 10 dólares australianos por hora de conexión. Esto puede parecer un inconveniente, pero también tiene su parte positiva: se pasa menos tiempo frente a la pantalla y más disfrutando del entorno.
Cómo moverse en Australia
En avión
Australia es enorme, y las distancias entre ciudades pueden ser de miles de kilómetros. Para trayectos largos, volar es la opción más rápida y cómoda. Por suerte, existen varias compañías low cost que operan rutas internas con frecuencia y a precios bastante competitivos. Algunas de las más conocidas son JetStar, Virgin Australia y Tiger Airways. Si reservas con antelación, puedes encontrar billetes muy económicos para moverte entre ciudades como Sídney, Melbourne, Brisbane o Perth.
En autocar
Viajar en autobús es una opción interesante si no conduces o si viajas solo. La red de autocares es amplia y la compañía Greyhound Australia ofrece billetes abiertos y pases flexibles que permiten recorrer el país por etapas. Sin embargo, para trayectos muy largos el avión suele ser más económico. Y si viajas en grupo o en pareja, alquilar un coche o una furgoneta es mucho más práctico, ya que te da mayor libertad para parar cuando quieras y explorar zonas menos accesibles.
En vehículo alquilado
Para muchos viajeros, incluida nuestra experiencia personal, la mejor forma de recorrer Australia es en furgoneta o autocaravana. El alquiler es razonablemente barato y hay muchas zonas donde se puede pernoctar sin coste, especialmente en áreas rurales o junto a playas. En todo el viaje, solo tuvimos que pagar una vez por dormir en un parque natural. Las demás noches las pasamos en espacios autorizados para furgonetas. Lo mejor de esta forma de viajar es despertarte en medio de paisajes espectaculares, con el mar o las montañas al lado.
Otra alternativa es alquilar un coche y acampar con tienda. Aunque pueda parecer más económica, la diferencia de precio no es tan grande y la comodidad es mucho menor. Además, si alquilas coche y duermes en hostales, el coste total seguramente supere el de una furgoneta equipada.
Dónde y qué comer en Australia
Australia no es precisamente un destino económico en lo que respecta a la comida, así que muchos viajeros optan por cocinar, sobre todo si viajan en furgoneta. En nuestro caso, tener una cocina portátil nos permitió preparar la mayoría de las comidas y reducir bastante el gasto.
En ciudades como Sídney o Melbourne, sin embargo, hay una gran oferta de comida asiática a buen precio. Gracias a la fuerte presencia de comunidades procedentes de países como Tailandia, Vietnam, China o Japón, es fácil encontrar restaurantes pequeños y asequibles donde probar platos auténticos. También hay muchos mercados con puestos de comida callejera que ofrecen opciones sabrosas y más económicas que los restaurantes convencionales.
En cuanto a la comida típica australiana, lo cierto es que no hay una gran tradición culinaria propia, ya que la cocina del país está muy influida por la inmigración. Aun así, probamos carne de canguro en varias ocasiones, que se vende en supermercados y carnicerías. Tiene un sabor fuerte, algo más intenso que la ternera, y suele prepararse a la plancha o en barbacoa. También es bastante habitual ver carne de cocodrilo o de emú en menús más turísticos o especializados.
Dónde dormir en Australia
En las grandes ciudades hay una oferta bastante amplia de alojamiento para todos los presupuestos, desde hostales mochileros hasta hoteles de gama media o alta. Aun así, los precios suelen ser elevados, sobre todo en temporada alta y en destinos turísticos muy visitados como Sídney, Cairns o Byron Bay.
Si tu idea es hacer una ruta por carretera, alquilar una furgoneta es una de las formas más económicas y prácticas de viajar. No solo porque te ahorras el coste del alojamiento, sino porque en Australia hay muchas zonas habilitadas para pernoctar de forma gratuita o por tarifas muy bajas. Algunos de estos espacios están gestionados por los consejos locales o por Parques Nacionales, y permiten dormir en plena naturaleza sin alejarse demasiado de las carreteras principales.
Hay aplicaciones y webs muy útiles como WikiCamps o CamperMate que muestran áreas de descanso, campings y parkings donde está permitido dormir. Gracias a esta libertad, pudimos dormir en lugares increíbles, cerca del mar o rodeados de naturaleza, sin necesidad de gastar más allá del combustible y la comida.
Presupuesto para viajar a Australia
Viajando en Australua hemos gastado unos 36 euros al día por persona. A pesar de gastar mucho dinero en gasolina (hemos recorrido la Great Ocean Road y buena parte de la Costa Nordeste), hemos podido mantener el presupuesto relativamente bajo. En Sydney hemos estado en casa de una familia que nos hospedó a través del Couchsurfing, mientras en el resto del viaje alquilamos siempre furgonetas baratas (lo bueno de no viajar a Australia en temporada alta), dormimos en áreas libres y cocinamos siempre lo que habíamos comprado en el supermercado.
💸 Presupuesto para viajar a Australia (2025)
Australia es uno de los países más caros para viajar, pero también uno de los más preparados para recibir viajeros con todo tipo de presupuestos. Si organizas bien tu ruta, puedes ahorrar bastante, sobre todo en transporte y alojamiento. Aquí te dejamos una estimación de gastos diarios para distintos estilos de viaje.
🏨 Alojamiento
- Hostales y dormitorios compartidos: entre 25 y 40 USD por noche.
- Habitaciones privadas básicas en guesthouses o moteles: 50 a 80 USD.
- Hoteles de gama media: 90 a 150 USD por noche.
- Hoteles y lodges de lujo: desde 180 USD en adelante.
- Alquiler de furgoneta camper: desde 60-100 USD por día (alojamiento y transporte en uno solo).
🍲 Comida
- Comida rápida o asiática en zonas urbanas: 7 a 12 USD por plato.
- Menús en restaurantes económicos: 15 a 25 USD.
- Restaurantes internacionales o turísticos: 30 a 50 USD por comida.
- Cerveza local (vaso de grifo): 5 a 8 USD.
- Café con leche: 3,5 a 5 USD.
- Supermercado: 8 a 12 USD diarios si cocinas tú mismo.
🚗 Transporte
- Alquiler de coche económico: 40 a 70 USD por día (sin incluir combustible).
- Furgonetas camper: 60 a 100 USD por día (según temporada y modelo).
- Autobuses de larga distancia (como Greyhound): 30 a 100 USD por trayecto, según la distancia.
- Vuelos internos: desde 60 a 150 USD por trayecto con aerolíneas low cost como Jetstar o Tigerair.
- Transporte público en ciudades (bus, tren, ferry): 2 a 4 USD por viaje.
🎟️ Actividades
- Entradas a parques nacionales: 10 a 25 USD (algunos son gratuitos).
- Excursiones guiadas (Great Barrier Reef, desierto, visitas culturales): 60 a 150 USD según el destino.
- Actividades especiales (buceo, vuelos panorámicos, encuentros con fauna): 100 USD o más.
- Alquiler de equipo (snorkel, bici, kayak): 10 a 30 USD al día.
📊 Presupuesto diario estimado
Mochilero: 60 a 90 USD
Gama media: 120 a 180 USD
Gama alta: 200+ USD
Estos presupuestos incluyen alojamiento, comidas, transporte básico y una o dos actividades. Ten en cuenta que los precios pueden variar según la región, la temporada y la antelación con la que reserves.
¿Te ha gustado el post? No te pierdas más inspiración y contenido exclusivo, ¡síguenos en Instagram!
💰 Ahorra con nuestros enlaces
🛡️ No olvides contratar el MEJOR SEGURO de VIAJE con HEYMONDO y disfruta de un 5% de descuento por ser nuestro lector.
🏛️ Reserva las MEJORES VISITAS GUIADAS y EXCURSIONES en AUSTRALIA
🏨 Reserva tu HOTEL al MEJOR PRECIO en AUSTRALIA
📶 Hazte con una tarjeta eSIM de Holafly con un 5 % de descuento para estar siempre conectado.
Deja un comentario: