Qué hacer en Ámsterdam en 2 días: itinerario optimizado para un finde

Escrito por Gabor Kovacs

Ámsterdam tiene un encanto difícil de describir. Sus canales que se entrelazan, sus casas estrechas y coloridas y las bicicletas por todas partes crean una atmósfera única que no encontrarás en ninguna otra ciudad.

Si solo dispones de 2 días en Ámsterdam, lo mejor es centrarte en lo esencial. En este itinerario te proponemos los planes más destacados, combinando los lugares que no puedes perderte con algunos rincones menos conocidos que muestran la ciudad desde otra perspectiva.

Aquí encontrarás propuestas para todos los gustos: paseos por los canales, museos imprescindibles o el ambiente nocturno del famoso Barrio Rojo. Sea cual sea tu estilo, este recorrido te ayudará a aprovechar al máximo tu tiempo en Ámsterdam.

💡 Consejo útil para un fin de semana en Ámsterdam

Un fin de semana en Ámsterdam puede parecer poco, pero con un buen plan puedes disfrutar de los imprescindibles y llevarte una idea completa de la ciudad. La clave está en organizarte bien y reservar con antelación las actividades y excursiones más populares en español, así evitarás colas y aprovecharás mejor el tiempo.

🏠 Excursión a Zaanse Schans, Volendam, Marken y Edam

🚤 Paseo en barco por los canales

🧭 Free tour por Ámsterdam

🎨 Entrada al Museo Van Gogh

🌙 Visita guiada por el Barrio Rojo

✈️ Traslado desde el aeropuerto

🌍 Qué ver en Ámsterdam en 2 días – Día 1.

🏛️ Plaza Dam y sus tesoros

Empezamos el primer día en Ámsterdam en la animada Plaza Dam, el corazón de la ciudad y lugar donde empezó a latir su historia moderna. Esta plaza, uno de los puntos más concurridos de Europa, ha sido escenario de mercados, manifestaciones y celebraciones desde hace siglos.

En el centro se eleva un obelisco de más de 20 metros, conocido como el Monumento Nacional, en memoria de los soldados holandeses que perdieron la vida durante la Segunda Guerra Mundial. Cada año, el 4 de mayo, la plaza se llena de flores y ceremonias para recordar aquel sacrificio.

El Palacio Real destaca por su imponente fachada clásica y por ser un testimonio del poderío de Ámsterdam en el siglo XVII, cuando la ciudad era una de las más ricas del mundo gracias al comercio y la navegación. Dentro, la Sala de Recepción impresiona con sus candelabros de bronce, tapices finos y techos decorados con pinturas que reflejan la historia y la cultura neerlandesa.

Frente al palacio se alza la Iglesia Nieuwe Kerk o Iglesia Nueva, construida en el siglo XV. Su torre y su fachada gótica dominan la plaza y son un buen punto de referencia para orientarse. Entrar en su interior es descubrir un espacio amplio y luminoso, con techos abovedados y vitrales que cuentan historias religiosas y locales. Además de su arquitectura, la iglesia acoge exposiciones temporales y conciertos, lo que la mantiene viva y conectada con la ciudad actual.

🚶 Haz un free tour por Ámsterdam

Hacer un free tour es una forma perfecta de situarte en la ciudad sin perderte ni sentirte abrumado. Te recomendamos este free tour por los imprescindibles de la ciudad, donde los guías locales no solo te mostrarán los lugares más famosos, sino que también comparten historias curiosas, leyendas urbanas y detalles que no encontrarás en las guías turísticas. Durante el recorrido conocerás la historia de Ámsterdam, desde su origen como un pequeño pueblo de pescadores en el río Amstel hasta convertirse en una metrópolis abierta y cosmopolita. Pasarás por calles adoquinadas, canales con puentes fotogénicos y plazas con siglos de historia

🌊 Pasear entre los canales

Recorrer Ámsterdam es adentrarse en un laberinto de canales que se extiende por más de 70 kilómetros, y que da a la ciudad ese aire tan especial que la hace reconocible al instante. Dedica buena parte de tu primer día a pasear por estas vías acuáticas, donde las casas estrechas y coloridas parecen casi colgar sobre el agua y los puentes de hierro dan un toque romántico.

Los canales no son solo decorativos: fueron construidos en el siglo XVII durante la próspera Edad de Oro de Ámsterdam, cuando la ciudad se convirtió en un centro comercial de primera magnitud. En aquel entonces, los canales servían como arterias principales para transportar mercancías, conectar barrios y organizar el crecimiento urbano de forma ordenada. Hoy en día, siguen marcando el ritmo de la ciudad, rodeados de cafeterías, tiendas de antigüedades y casas históricas que cuentan historias de comerciantes y familias adineradas.

Un buen punto de partida es el Grachtengordel, el anillo de canales que es Patrimonio Mundial de la UNESCO. Aquí se encuentran los tres canales principales:

Herengracht: con sus elegantes mansiones, era donde residía la élite de Ámsterdam. Sus fachadas reflejan el lujo de otra época y muchas todavía conservan interiores originales.

Keizersgracht: hogar de comerciantes y banqueros prósperos, con edificios que muestran la arquitectura típica de los siglos XVII y XVIII.

Prinsengracht: el canal más bullicioso, donde se movía gran parte de la actividad comercial. Pasear por sus orillas es imaginar cómo era la vida cotidiana durante la Edad de Oro, con barcos cargados de especias, telas y curiosidades llegadas de todo el mundo.

Un consejo: aprovecha la luz de la mañana o del atardecer para tus fotos. Los reflejos de las casas en el agua y los puentes antiguos crean escenas que parecen sacadas de un cuadro.

🚤 Dar un paseo en barco por los canales

Los canales de Ámsterdam no son solo un elemento pintoresco: son el corazón que ha marcado el ritmo de la ciudad durante siglos. Pasearlos a pie es imprescindible, pero navegar por ellos ofrece una experiencia completamente diferente. Desde un barco, las fachadas inclinadas de las casas, los puentes antiguos y los pequeños patios que se asoman al agua cobran vida de manera especial.

Hay muchas opciones de cruceros: algunos son tours panorámicos de una hora que muestran los monumentos más emblemáticos, otros incluyen cena o música en vivo, y también hay barcos más pequeños ideales para fotos tranquilas y paisajes románticos. Si buscas una opción económica y encantadora, puedes reservar tu paseo en barco aquí, mientras si quieres una experiencia especial, nuestra recomendación este crucero nocturno por los canales de Ámsterdam.

📖 Casa de Ana Frank

Nuestro recorrido continúa en la Casa de Ana Frank, un lugar que deja huella por la historia que alberga. En esta casa, escondida entre las calles del Barrio Judío, Ana Frank y su familia vivieron durante más de dos años tratando de escapar de la persecución nazi. Lo que comenzó como un refugio se convirtió en un testimonio universal gracias al diario que Ana escribió durante aquel tiempo, donde plasmó sus miedos, sueños y reflexiones con una madurez sorprendente para su edad.

Visitar el museo es una experiencia intensa: recorrer las estrechas habitaciones y pasadizos, imaginar la vida cotidiana en el escondite y escuchar fragmentos del diario nos acerca a una realidad difícil de asimilar, pero fundamental para entender la historia y la resiliencia humana. Es un lugar que conmueve y enseña, recordando la importancia de la memoria histórica.

Este museo es muy popular, así que para evitar largas esperas conviene visitarlo temprano por la mañana o a última hora de la tarde. Si quieres profundizar en la historia y conocer más detalles, puedes reservar este tour de Ana Frank por el Barrio Judío, donde un guía te contará sobre su vida, su diario y el contexto de la época.

Para conocer más sobre la historia del barrio durante la Segunda Guerra Mundial, también puedes considerar el Tour de la II Guerra Mundial por el Barrio Judío, que ofrece un recorrido más amplio sobre los acontecimientos de aquel periodo.

⛪ Westerkerk y su imponente torre

En tu paseo por el centro de Ámsterdam, no puedes perderte la Westerkerk, o Iglesia del Oeste, una de las construcciones más impresionantes de la ciudad. Esta iglesia del siglo XVII combina majestuosidad y detalles cuidados, y además guarda un curioso vínculo con la historia del arte: aquí descansan los restos de Rembrandt y de su hijo, lo que convierte la visita en un pequeño viaje a la vida del maestro holandés.

Sin embargo, lo que realmente impresiona es su Westertoren, una torre que se eleva 85 metros sobre los tejados de Ámsterdam y que se ha convertido en un punto de referencia inconfundible. Subir hasta la cima puede requerir paciencia —las colas son habituales— pero la recompensa vale totalmente la pena. Desde arriba, la vista panorámica del centro histórico, los canales entrelazados y los tejados de ladrillo rojo te hace sentir que estás sobrevolando la ciudad.

Un detalle curioso: en la torre hay un carillón con 51 campanas que todavía suena cada hora, llenando de música el aire y recordando que esta iglesia no solo es un monumento, sino también un lugar vivo dentro de la ciudad. Si coincide tu visita con un atardecer, la luz sobre los canales y las fachadas de las casas es simplemente espectacular y ofrece una de las mejores oportunidades para fotografiar Ámsterdam desde las alturas.

🏘️ Barrio de Jordaan: calles con historia y encanto

El Jordaan es uno de esos barrios que te hace sentir que estás viendo la otra cara de Ámsterdam: menos turística, más auténtica y llena de vida cotidiana. Originalmente se construyó en el siglo XVII para alojar a los trabajadores y artesanos de la ciudad, y hoy mantiene ese espíritu creativo que se percibe en cada rincón. Sus calles adoquinadas, canales tranquilos y fachadas estrechas cuentan historias de siglos de comercio, arte y vida vecinal.

Paseando por Jordaan, notarás el aroma de los tradicionales cafés marrones, esos bares históricos donde se sirve café y cerveza rodeado de madera oscura y una atmósfera acogedora que parece detenida en el tiempo. También hay tiendas de antigüedades, galerías de arte local y pequeños talleres que reflejan la tradición y el talento de los residentes. Es fácil dejarse llevar por la curiosidad y terminar descubriendo patios escondidos, jardines secretos y pequeñas plazas donde la vida del barrio transcurre con calma.

Si quieres una visión más completa, te recomendamos unirte a este recorrido gratuito por Jordaan, Leidseplein y Vondelpark, que te permite conocer los rincones más especiales del barrio y entender su historia mientras caminas entre canales y casas que parecen salidas de un cuadro.

🛍️ Negen Straatjes: las calles con más estilo de Ámsterdam

Justo al lado de Jordaan se encuentra el encantador barrio de Negen Straatjes, que significa “Las Nueve Calles”. Este pequeño laberinto de calles peatonales ha sido durante décadas un refugio para artistas, diseñadores y creativos que buscaban un lugar diferente al bullicio del centro. Pasear por aquí es descubrir boutiques originales, tiendas vintage llenas de carácter, galerías de arte local y cafés acogedores donde detenerse a observar la vida pasar.

Los fines de semana, el barrio se llena de energía: mercadillos callejeros, músicos que tocan en las esquinas y pequeños eventos que dan vida a cada callejón. Más que un simple destino de compras, Negen Straatjes ofrece una experiencia que combina historia, creatividad y estilo urbano, perfecta para perderse un par de horas descubriendo tesoros escondidos y rincones fotogénicos que parecen salidos de una postal.

🌿 Plaza Spui y el Begijnhof

Seguimos nuestro recorrido hacia la acogedora Plaza Spui, un rincón de Ámsterdam donde siempre me gusta detenerme. Rodeada de librerías, cafés con terraza y edificios de colores cálidos, esta plaza respira un aire intelectual y bohemio gracias a los mercados de libros y arte que a menudo se instalan aquí.

Entre sus callejuelas se esconde un pequeño tesoro: el Begijnhof. Cruzar su entrada es como retroceder varios siglos: de repente, el bullicio de la ciudad queda fuera y te encuentras en un patio silencioso, con casas de fachada típica holandesa y jardines cuidados que parecen sacados de un cuento.

El Begijnhof tiene una historia fascinante. Durante siglos fue hogar de las beguinas, mujeres que vivían en comunidad, dedicadas a la oración y al servicio sin tomar votos formales de clausura. Entre los edificios destaca la casa más antigua de Ámsterdam, en el número 34, y la iglesia gótica Engelse Kerk, que conserva detalles de su pasado religioso. Pasear por aquí es imaginar la vida cotidiana de estas mujeres y entender un poco mejor la historia social de la ciudad.

Un dato curioso: aunque hoy es un remanso de paz, en el pasado el Begijnhof estuvo protegido por puertas que se cerraban al anochecer, como una pequeña ciudad dentro de la ciudad. Es uno de esos lugares donde Ámsterdam revela su lado más íntimo y secreto, lejos de los canales y las multitudes.

🌸 Bloemenmarkt, el mercado de las flores

En pleno canal Singel, uno de los más antiguos de Ámsterdam, se encuentra el pintoresco Bloemenmarkt, el mercado de flores más famoso de la ciudad. Durante siglos estuvo montado sobre barcazas flotantes, lo que le daba un encanto muy especial, y aunque hoy las tiendas se apoyan en estructuras fijas, todavía conserva ese espíritu ligado al agua que caracteriza tanto a la ciudad.

Un paseo por el Bloemenmarkt es un estallido de colores y aromas. Tulipanes, narcisos, jacintos o plantas exóticas llenan los puestos en cualquier época del año. Los bulbos de tulipán son, sin duda, el recuerdo estrella: fáciles de transportar, económicos y con la promesa de que, meses después, en tu jardín o en una maceta, florecerá un pedacito de Holanda. Muchos puestos incluso venden paquetes preparados especialmente para llevar en la maleta.

El tulipán, además, tiene una historia curiosa en los Países Bajos. En el siglo XVII llegó a tal popularidad que se produjo la famosa Tulipomanía, considerada la primera burbuja especulativa de la historia, donde algunos bulbos llegaron a costar lo mismo que una casa. Hoy, afortunadamente, no necesitas empeñar nada para llevarte unos cuantos.

Si bien el mercado se ha vuelto algo turístico, sigue siendo un lugar lleno de encanto, sobre todo si te interesa la jardinería o simplemente quieres pasear entre flores. Además, encontrarás puestos con souvenirs, semillas certificadas para viajar a otros países y hasta pequeños objetos de cerámica de Delft.

Un consejo práctico: si visitas Ámsterdam en primavera, aprovecha para complementar la experiencia con una excursión a Keukenhof, los jardines más famosos del país, donde millones de tulipanes florecen al mismo tiempo.

⛪ Oude Kerk en el Barrio Rojo

Terminamos el primer día en Ámsterdam en uno de sus lugares más icónicos y polémicos: el Barrio Rojo. Nuestra primera parada es la Oude Kerk (Iglesia Vieja), el edificio más antiguo de la ciudad. Este templo gótico fue consagrado en el año 1306, cuando la ciudad apenas empezaba a crecer alrededor de sus canales. Su presencia imponente recuerda que incluso en un barrio asociado hoy a la vida nocturna y al turismo, late un profundo pasado histórico.

La Oude Kerk sorprende por su mezcla de solemnidad y sencillez. Bajo su techo de madera, que es el mayor de toda Europa de este tipo, descansan más de 2.000 personas enterradas en el suelo de piedra, entre ellas figuras célebres de la ciudad, como Saskia van Uylenburgh, esposa de Rembrandt. Los vitrales iluminan con tonos vibrantes el interior, creando un ambiente que mezcla espiritualidad y arte.

El contraste es llamativo: mientras en las calles del barrio reina la animación constante, dentro de la iglesia el tiempo parece detenerse. Además, hoy en día el templo no solo acoge servicios religiosos, sino también exposiciones de arte contemporáneo que dialogan con la historia del lugar.

Una manera interesante de descubrir esta parte de Ámsterdam es apuntarse a una visita guiada por el Barrio Rojo, donde un guía local comparte anécdotas y curiosidades que ayudan a entender la transformación de este vecindario, desde sus orígenes medievales hasta la actualidad.

🌃 La noche en el Barrio Rojo

Si solo dispones de una noche en Ámsterdam, merece la pena continuar en este barrio tan singular. Bajo la luz de los neones rojos que iluminan sus calles estrechas, se respira una atmósfera única, mezcla de curiosidad, historia y modernidad.

Sus orígenes se remontan al siglo XIV, cuando esta zona cercana al puerto comenzó a llenarse de marineros y comerciantes. Las tabernas, burdeles y locales de entretenimiento surgieron para atender a ese flujo constante de viajeros. Con el paso del tiempo, se convirtió en un distrito reconocido internacionalmente, símbolo tanto de la tolerancia neerlandesa como de su peculiar manera de regular ciertas actividades.

Hoy, caminar por sus calles es toda una experiencia. Las fachadas iluminadas con luces rojas, los reflejos en los canales y la mezcla de visitantes de todo el mundo crean un ambiente vibrante. Además de los famosos escaparates, el barrio cuenta con bares históricos, cafés y clubes donde la vida nocturna se extiende hasta altas horas.

En cuanto a los coffeeshops, este es uno de los lugares más visitados para quienes quieren acercarse a la cultura del cannabis en un entorno regulado. Conviene informarse bien de las normas locales antes de entrar, ya que la legislación holandesa es muy específica en este tema.

🌍 Qué ver en Ámsterdam en 2 días – Día 2.

Si cuentas con un fin de semana en Ámsterdam, el segundo día es perfecto para abrir un poco más el mapa y salir del centro. Puedes optar por los museos y la vida cultural, o dejarte llevar por la naturaleza y los pueblos tradicionales que rodean la ciudad. Aquí te propongo una de las excursiones más completas, que reúne historia, paisajes y la esencia de la cultura holandesa.

🌾 Opción 1: El campo holandés – excursión a Volendam, Marken, Edam y Zaanse Schans

Una de las mejores maneras de aprovechar tu estancia es salir a descubrir los alrededores con esta excursión organizada, que te lleva a algunos de los lugares más pintorescos de Holanda. En pocas horas pasarás de los canales urbanos a paisajes con molinos de viento, casas de madera y mercados de queso con siglos de historia.

🐟 Volendam

Este pueblo pesquero a orillas del lago IJsselmeer es famoso por sus casitas de colores y su ambiente animado. Durante siglos fue un puerto de gran importancia, y aún hoy conserva esa identidad marinera. En el paseo marítimo puedes ver barcas tradicionales y probar uno de los bocados más típicos de la región: el haring, arenque marinado que los locales comen acompañado de cebolla. Si prefieres algo más suave, los puestos también ofrecen pescado ahumado y quesos artesanos.

🏡 Marken

En el pasado, Marken era una isla aislada del mundo, y eso le dio un carácter muy especial. Hoy en día está conectada por un dique, pero todavía mantiene su aire único con las casas de madera pintadas de verde que parecen sacadas de una maqueta. Sus calles estrechas invitan a pasear despacio, y si te interesa la tradición local, puedes visitar un taller donde aún fabrican los famosos zuecos de madera, un símbolo de Holanda que aquí se sigue elaborando a mano.

🧀 Edam

Seguro que el nombre de Edam ya te suena por su queso redondo y cubierto de cera roja. Pero este pueblo es mucho más que gastronomía. Sus canales estrechos, los puentes levadizos y las casas históricas hacen que pasear por sus calles sea una experiencia encantadora. En verano todavía se celebra el mercado tradicional de quesos, donde se reproducen las antiguas técnicas de compraventa, con trajes típicos y carros de madera.

🌾 Zaanse Schans

Si sueñas con ver molinos de viento en funcionamiento, este es el lugar. Zaanse Schans es una especie de museo al aire libre que recrea la vida rural holandesa del siglo XVIII. Además de pasear junto a los molinos, puedes entrar en algunos de ellos para descubrir cómo molían especias, pigmentos o aceites. También encontrarás talleres de quesos y de zuecos, perfectos para llevarte una idea más clara de cómo era la vida cotidiana en el campo holandés. Desde lo alto de un molino, las vistas del paisaje son inolvidables.

Si quieres olvidarte de los traslados y aprovechar al máximo el tiempo, puedes reservar la excursión organizada aquí, una manera cómoda de descubrir cuatro lugares muy distintos en un solo día.

🏛️ Opción 2: Los mejores museos de Ámsterdam

🎨 Museo Van Gogh

En pleno Museumplein, la gran plaza cultural de Ámsterdam, se encuentra el Museo Van Gogh, uno de los lugares más visitados de los Países Bajos. Este espacio no solo expone algunas de las obras más conocidas del pintor, sino que también permite conocer de cerca su vida, sus dificultades y su extraordinario proceso creativo.

Entre las piezas más célebres verás versiones de Los Girasoles, La Habitación de Van Gogh en Arlés y sus inconfundibles paisajes de tonos vibrantes. Una de las partes más emocionantes es la colección de cartas que intercambió con su hermano Theo, donde se percibe la lucha personal de un artista adelantado a su tiempo.

Si quieres evitar colas, puedes reservar tu entrada sin esperas aquí. Y si deseas una experiencia más completa, merece la pena unirte a esta visita guiada en español, donde descubrirás curiosidades que muchas veces pasan desapercibidas.

🖼️ Rijksmuseum

Justo frente al Museo Van Gogh se levanta el Rijksmuseum, un edificio monumental que guarda más de 8.000 piezas entre pinturas, esculturas y objetos históricos. Es el gran templo del arte neerlandés, y recorrer sus salas es como caminar a través de varios siglos de historia.

El museo es famoso por custodiar La Ronda Nocturna de Rembrandt, una de las obras más influyentes del barroco europeo, y La Lechera de Vermeer, un cuadro que sorprende por la serenidad y la luz con que retrata una escena cotidiana. Además, aquí también encontrarás delicados objetos de porcelana, armaduras antiguas y maquetas de barcos que recuerdan la época dorada de la navegación holandesa.

Para ahorrar tiempo, puedes conseguir tu entrada sin colas aquí o, si prefieres, disfrutar de una visita guiada en español que contextualiza las obras en su época.

🌳 Vondelpark

Después de tanta intensidad cultural, nada mejor que relajarse en el Vondelpark, el pulmón verde de Ámsterdam. Inaugurado en 1865, este parque fue diseñado al estilo de los grandes jardines europeos del siglo XIX y se ha convertido en uno de los lugares más queridos por los habitantes de la ciudad.

Con sus lagos, prados y senderos arbolados, es perfecto para pasear en bicicleta, tumbarse en el césped o disfrutar de un picnic. Durante los meses de verano, el teatro al aire libre del parque acoge conciertos gratuitos y representaciones que lo llenan de ambiente. No es raro ver a familias, músicos callejeros o grupos de amigos improvisando actividades, lo que convierte al Vondelpark en un espacio vivo y siempre cambiante.

🍺 Heineken Experience

La cerveza Heineken es uno de los productos neerlandeses más reconocidos internacionalmente, y visitar su antigua fábrica es casi como entrar en un museo dedicado a la historia de una marca global. En la Heineken Experience descubrirás cómo nació la empresa en 1864, quién fue Gerard Adriaan Heineken y cómo una pequeña cervecería se convirtió en un icono presente en más de 190 países.

El recorrido muestra el proceso de elaboración, desde la selección del lúpulo hasta el embotellado, con varias experiencias interactivas en el camino. Al final, podrás probar distintas variedades de cerveza en un ambiente moderno que mezcla tradición con marketing de vanguardia. Si quieres vivir esta experiencia, compra tus entradas sin colas aquí.

🌷 Opción 3 (solo en primavera): el universo de los tulipanes en Keukenhof

Si hay una imagen que viene a la mente cuando pensamos en Holanda, seguramente son los tulipanes. Y no es casualidad, porque este pequeño país lleva siglos ligado a estas flores. Durante el siglo XVII, en plena *Edad de Oro neerlandesa*, se produjo la famosa “tulipomanía”, una auténtica fiebre colectiva en la que los bulbos de tulipán llegaron a costar fortunas. Hoy, aunque ya no se pagan sumas desorbitadas, la pasión por estas flores sigue muy viva y alcanza su máxima expresión en el Parque de Keukenhof.

Cada primavera, este jardín se transforma en un mosaico de colores gracias a los más de siete millones de bulbos que florecen entre marzo y mayo. Los protagonistas son, por supuesto, los tulipanes, pero también encontrarás narcisos, jacintos y lirios. Pasear por sus senderos es como caminar dentro de un cuadro lleno de vida, con perfumes y tonalidades que cambian a cada paso.

Un detalle curioso es que el nombre Keukenhof significa “jardín de la cocina”, ya que en el siglo XV estas tierras eran el huerto de hierbas de una condesa local. Lo que comenzó siendo un espacio práctico se ha convertido en uno de los parques florales más famosos del mundo, atrayendo cada año a visitantes de todos los rincones.

Si quieres conocer más sobre nuestra experiencia, puedes leer nuestro relato completo aquí. Y si estás pensando en visitarlo, lo más cómodo es reservar esta excursión desde Ámsterdam, que incluye transporte y la entrada sin esperas.

⚠️ Considera contratar un seguro de viaje 🛡️

Aunque la Tarjeta Sanitaria Europea (TSE) cubre la atención médica en hospitales dentro de la UE, no cubre tarifas o copagos que pagan también los residentes locales, algo gratuito en España pero no en muchos otros países europeos. Además, la TSE no protege frente a imprevistos como pérdida de equipaje, cancelaciones y otros imprevistos. Por eso, nosotros siempre viajamos asegurados con el seguro de Heymondo, incluso dentro de la zona Schengen, lo que nos da la tranquilidad que necesitamos viajando con un niño.

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🗓️ Si tienes más días en Ámsterdam

¿Tienes la suerte de quedarte más de dos días en la ciudad? Ámsterdam guarda un montón de rincones menos conocidos que merecen la pena, y además es un punto de partida ideal para hacer excursiones a otras ciudades de los Países Bajos o incluso a la vecina Bélgica.

⛪ Una iglesia escondida en un ático

Durante la Reforma Protestante, los católicos neerlandeses no podían celebrar sus cultos de manera pública. Por eso surgieron iglesias clandestinas como la Iglesia de Nuestra Señora del Ático, instalada en la parte superior de una casa del siglo XVII. Hoy se conserva como museo y es una visita muy especial: entrarás en una vivienda típica de la época y, al subir al último piso, descubrirás una iglesia completa escondida bajo el tejado.

✡️ La huella judía en la ciudad

La Sinagoga Portuguesa es uno de los símbolos de la comunidad sefardí que encontró refugio en Ámsterdam en el siglo XVII. Su interior, iluminado únicamente con velas, conserva la atmósfera solemne de aquellos tiempos. Además, forma parte del Barrio Judío, donde también se encuentran el Museo Histórico Judío y otros lugares que cuentan la historia de esta comunidad en los Países Bajos.

🐉 Barrio Chino y templos orientales

Cerca del Barrio Rojo se encuentra el Barrio Chino, un lugar lleno de restaurantes, tiendas y templos. El más llamativo es el He Hua, el templo budista más grande de Europa, con su fachada colorida que parece transportarte a Asia en pleno centro de Ámsterdam.

🏰 Historia en Nieuwmarkt

El barrio de Nieuwmarkt es una de las zonas con más sabor medieval de la ciudad. Allí encontrarás The Waag, un edificio fortificado del siglo XV que fue puerta de la muralla, sede de gremios y hasta sala de disecciones en tiempos de Rembrandt. Hoy es un café-restaurante perfecto para sentarse y disfrutar de la plaza.

🌉 Puentes con encanto

Ámsterdam tiene más de mil puentes, pero el Magere Brug o “Puente Delgado” es quizá el más famoso. Es un puente levadizo de madera que todavía hoy se abre varias veces al día para dejar pasar los barcos que navegan por el Amstel.

❄️ Un bar helado y otras experiencias curiosas

Si buscas algo diferente, puedes visitar el Icebar Xtracold, donde todo —paredes, vasos, mesas— está hecho de hielo y la temperatura ronda los -10 °C. También puedes acercarte a una fábrica de diamantes para descubrir por qué Ámsterdam fue durante siglos una de las capitales mundiales de la talla de estas piedras preciosas.

🔬 Museos originales

Más allá de los grandes clásicos, hay museos muy recomendables: el NEMO, con exposiciones interactivas de ciencia y tecnología que hacen las delicias de pequeños y mayores, o el Moco, dedicado al arte moderno y contemporáneo con obras de Warhol, Banksy o Basquiat.

🌿 Un respiro verde

El Jardín Botánico de Ámsterdam, fundado en 1638, es uno de los más antiguos del mundo. Alberga miles de especies de plantas y su espectacular casa de las palmeras es uno de los rincones más fotogénicos.

🚂 Excursiones desde Ámsterdam

– Brujas: una escapada a la joya medieval de Bélgica, con canales, plazas adoquinadas y casas gremiales. Puedes ver más en nuestro artículo sobre Brujas y reservar tu excursión desde Ámsterdam aquí.

– Giethoorn: conocido como la “Venecia de Holanda”, un pueblo donde casi no hay coches y la vida transcurre entre canales y jardines de cuento.

– Róterdam y La Haya: la primera sorprende con su arquitectura futurista; la segunda, con su aire distinguido y el famoso Palacio de la Paz. Si quieres visitarlas en un mismo día, puedes reservar la excursión aquí.

🗺️ Mapa de Ámsterdam en 2 días

✈️ Cómo llegar a Ámsterdam desde el aeropuerto

Ámsterdam recibe vuelos diarios desde prácticamente toda Europa y muchos destinos intercontinentales. El Aeropuerto de Schiphol, situado a solo 20 kilómetros del centro, es uno de los más transitados del continente, así que no tendrás problema en encontrar conexiones.

Para llegar a la ciudad, el tren directo a la Estación Central es la opción más rápida: tarda unos 15-20 minutos y sale con mucha frecuencia. Es ideal si tu alojamiento está en el centro o cerca de los principales canales.

Otra alternativa son los autobuses Airport Express (línea 397), que conectan Schiphol con la zona de Museumplein y Leidseplein en unos 30 minutos, lugares muy prácticos si tu hotel se encuentra en el barrio de los museos o en el área más animada de la ciudad.

Si llevas mucho equipaje o simplemente prefieres no preocuparte por mapas ni horarios, lo más cómodo es reservar un traslado privado o compartido desde el aeropuerto. Te recogerán directamente en la terminal y te dejarán en tu alojamiento, sin complicaciones.

Un detalle interesante: Schiphol es uno de los pocos aeropuertos del mundo que tiene su propia biblioteca pública y un pequeño museo gestionado por el Rijksmuseum. Si tu vuelo se retrasa o tienes que esperar, puede ser un buen entretenimiento antes de salir hacia la ciudad.

🚲 Cómo desplazarse por Ámsterdam

El centro de Ámsterdam es compacto y muy agradable para recorrer caminando. Sin embargo, tarde o temprano acabarás utilizando el transporte público para llegar a barrios más alejados o para moverte más rápido.

El sistema es eficiente y sencillo:

Los tranvías son la mejor opción para moverte por el centro y conectar con las principales atracciones.

El metro resulta práctico si tu alojamiento está en barrios periféricos o si quieres llegar a zonas como Bijlmer o Amsterdam Arena.

También hay una red de ferries gratuitos que cruzan el río IJ y conectan la Estación Central con Ámsterdam Norte, una zona cada vez más de moda.

Una buena idea es comprar un abono de transporte de 1 o 2 días, que te permitirá usar metro, tranvías y autobuses sin preocuparte por billetes individuales.

Pero si quieres vivir Ámsterdam como un local, no hay nada más auténtico que moverse en bicicleta. La ciudad tiene más bicis que habitantes y cuenta con una de las redes de carriles bici mejor diseñadas del mundo. Eso sí, la convivencia con otros ciclistas puede ser intensa, así que lo mejor es empezar con un tour guiado en bicicleta. Además de pedalear, descubrirás la historia y los rincones más auténticos de la ciudad con la tranquilidad de ir acompañado por un guía.

🏨 Dónde alojarse en Ámsterdam

Pasar un fin de semana en Ámsterdam requiere elegir un alojamiento estratégico que te permita aprovechar al máximo tu tiempo. Desde el bullicioso centro hasta barrios tranquilos junto a los canales, la ciudad ofrece opciones para todos los gustos. Aquí tienes una guía con los mejores barrios y hoteles recomendados para un viaje corto pero inolvidable.

Centro histórico: El centro de Ámsterdam es ideal para un fin de semana intenso de turismo. Con una ubicación privilegiada cerca de la Plaza Dam, el Barrio Rojo y la estación central, alojarte aquí significa tener las principales atracciones a unos pasos. Aunque es una zona vibrante y animada, algunos alojamientos ofrecen tranquilidad en medio del bullicio.
Recomendación: NH Collection Amsterdam Grand Hotel Krasnapolsky. Ubicado justo en la Plaza Dam, este hotel combina lujo y comodidad con habitaciones modernas y un desayuno excepcional en su icónica sala de invierno.

Jordaan: Si prefieres un ambiente más relajado pero aún cerca del centro, Jordaan es perfecto. Este pintoresco barrio está lleno de pequeñas galerías, cafeterías y tiendas independientes, además de ser famoso por sus fotogénicos canales. Es ideal para viajeros que buscan un toque local y romántico.
Recomendación: Canal House. Este elegante hotel boutique ofrece habitaciones decoradas con estilo contemporáneo en un edificio histórico frente a los canales. Es perfecto para quienes buscan lujo y privacidad en un entorno auténtico.

De Pijp: De Pijp es una opción fantástica para viajeros jóvenes o quienes buscan explorar la faceta más moderna de Ámsterdam. Este barrio, conocido por su ambiente bohemio y el popular mercado Albert Cuyp, ofrece una vibrante mezcla de culturas y estilos. Está bien conectado con el centro mediante transporte público.
Recomendación: Hotel Okura Amsterdam. Este hotel de lujo ofrece amplias habitaciones y una experiencia culinaria de primer nivel, con restaurantes galardonados y un spa que te ayudará a relajarte después de un día explorando.

Barrio de los Museos: El Barrio de los Museos es ideal si tu fin de semana está enfocado en disfrutar del arte y la cultura. Con lugares icónicos como el Rijksmuseum, el Museo Van Gogh y el Vondelpark, aquí estarás rodeado de tranquilidad pero con fácil acceso a las principales atracciones.
Recomendación: Max Brown Hotel Museum Square. Este hotel boutique combina un diseño acogedor con una ubicación envidiable, perfecta para quienes quieren comenzar su día visitando los museos más famosos de la ciudad.

Consejos para tu estancia

• Reserva con antelación: Ámsterdam es muy demandada durante los fines de semana, especialmente en primavera y verano. Cuanto antes reserves, mejores opciones encontrarás. Para encontrar las mejores ofertas de alojamiento en Ámsterdam, deberías simplemente hacer click aquí.
• Elige tu ubicación según tu plan de viaje: Si priorizas el turismo cultural, elige la zona de los museos. Para una experiencia nocturna, Jordaan o el centro histórico son mejores opciones.
• Aprovecha el transporte público: La ciudad tiene una excelente red de tranvías y bicicletas compartidas, lo que facilita moverte por los distintos barrios, incluso si te alojas lejos del centro.
• Considera opciones únicas: Para una experiencia distinta, explora alojamientos en casas flotantes o apartamentos junto a los canales, que te permitirán vivir el verdadero espíritu de Ámsterdam.

¡Y así concluye nuestra emocionante guía de 2 días en Ámsterdam! A pesar del breve lapso de tiempo que implica un fin de semana, confiamos en que nuestro itinerario te haya permitido disfrutar de la verdadera esencia de esta ciudad única.

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