30 fotos que te darán ganas de hacer un viaje al Amazonas

La Amazonia es el ecosistema con más biodiversidad en nuestro planeta. Una buena parte de esta misteriosa selva sigue desconocida y es accesible solo navegando por el poderoso Río Amazonas. Por estas razones no es difícil imaginar que un viaje al Amazonas es un sueño para muchos viajeros y una de las mejores cosas que hacer en Brasil. Nosotros hemos tenido la suerte de pasar dos semanas en este entorno espectacular que no tiene iguales. Los animales, las plantas, las aldeas inundadas están entre nuestros mejores recuerdos, aquellas memorias que son inolvidables.

Nuestro objetivo es llevarte de viaje a Amazonia a través de nuestras fotografías y hemos preparado una selección fotográfica de algunas de las mejores imágenes que hemos traído de esta región. Estamos seguros que la selección te da ganas de organizar un viaje al Amazonas brasileño. Relájate, ponte cómodo e imagina de estar en este maravilloso lugar. Tu viaje al Amazonas empieza aquí! Buen viaje!!!!

Viaje a Amazonia a través de fotos

Imagina que hace mucho calor, pero la brisa del río Amazonas sopla y tu estás en un barco navegando por el río Amazonas. Es la época de lluvias y la mayor parte de la selva Amazónica está inundada.

Estás viendo algo que pasa solo aquí en estas tierras lejanas, el encuentro de las aguas donde los ríos Tapajós y el Amazonas se encuentran.

Uno de los muchos animales de la Amazonia curioso por tu presencia viene a verte; es un delfín rosa. ¡Qué emoción; suerte que conseguiste sacarle una foto!

Sigues navegando en la zona de la ciudad de Santarém y un local muy simpático de aspecto divertido te saluda.

Las personas que viven en sus casas tienen que convivir con la época de lluvias, cuando la mayoría de su tierra se inunda.

Y la única forma de transporte es una canoa.

De lejos puedes ver una de las muchas islas que están en el río Amazonas.

¿Qué es lo que se ve allí en medio de un metro cuadrado de césped? ¡Vaya! es un cerdo de una granja que está en la única pieza de tierra que todavía no está sumergida por el agua.

Cambiamos de barco y montamos en una canoa de madera de la cual de vez en cuando tenemos que sacar agua para que no nos inundemos. Entramos en la selva Amazónica densa: dado el nivel del agua estamos bastante cerca de la cima de los árboles y esto nos permite ver los animales mucho mejor y de más cerca. Sin embargo, también tenemos que tener cuidado y mover las ramas de los árboles que encontramos en el camino.

Otro de los animales de la Amazonia aparece al lado nuestro, una estupenda libélula de color rojo intenso.

Seguimos y encontramos otro de los animales de la Amazonia, un perezoso que se mueve lentamente de árbol en árbol.

Un ruido sospechoso en la cima de un árbol capta nuestra atención, es un mono capuchino que está saltando de rama en rama. Se para, nos mira y luego sigue su camino.

Entre los árboles densos de la selva conseguimos ver un poquito de cielo a través de una enorme tela de araña.

Seguimos navegando en la selva inundada y llegamos a un lago que nos deja boquiabiertos.

En un rinconcito de este lago hay una casita, seguramente viven algunos locales, intentamos ver para captar algo de su día a día pero no aparece nadie.

Lo que sí aparece es un árbol lleno de pájaros que allí han decidido establecer su casa.

Decidimos bajar del barco en una parte de la selva que no está inundada para tender un poco las piernas y relajar un poco los brazos de tanto remar y sacar agua de la canoa y encontramos un paisaje estupendo y unos árboles enormes.

El más grande de todos es un árbol ceiba, uno de los árboles más grandes de la Selva Amazónica.

Volvemos a nuestra  canoa y empezamos de nuevo a remar, notamos una iguana que toma el sol y nos mira con reticencia,

mientras una mariposa apoyada en un hilo de hierba está relajándose.

Seguimos navegando para volver a la selva densa pero antes nos damos cuenta de una de las plantas más bonitas de la Amazonia que no hemos visto antes, es un maravilloso, enorme lirio acuático.

Volvemos nuevamente a la selva densa y entre las ramas de los árboles vemos otros dos animales de la amazonia, un pájaro hoacín, uno de los pájaros más extraños del Amazonas

y un halcón de ojos amarillos.

Dejamos nuestra canoa y retomamos el barco a motor para volver a la ciudad de Santarém. Es ya tarde y disfrutamos de un precioso atardecer en el río Amazonas.

Volvemos a la ciudad de Santarém también inundada,

Aquí termina nuestro viaje en el Amazonas. Las fotos de esta recopilación han sido tomadas todas en las zonas de Santarém y en los alrededores de Manaus.