La Quebrada de Humahuaca, paisajes de ensueño

La Quebrada de la Humahuaca es uno de los lugares más espectaculares y coloridas que conocer en Argentina. Se encuentra en el norte de Argentina donde los pueblos enseñan la cara indígena de Argentina. Las montañas en esta zona no tienen nada que ver con las montañas de la Patagonia, pero sus colores y formas son igualmente fascinantes. No es por nada que la Quebrada de Humahuaca ha sido declarada Patromonio Mundial por la UNESCO. Aquí te contaremos nuestra experiencia con todo lo que tienes que hacer en la Quebrada de Humahuaca.

Cómo llegar a la Quebrada de Humahuaca

Muchos viajeros llegan al norte desde el desierto de Atacama en Chile. Nosotros también cogimos un bus por la mañana en San Pedro de Atacama y luego nos esperó dos horas de viaje para cruzar el Paso Jama y llegar al lado argentino de la frontera. El viaje por el paso es bellísimo, la ruta pasa muy cerca de los picos nevados, algunas lagunas y un salar bastante grande.  Gracias a unos retrasos llegamos a Purmamarca ya de noche.

Qué ver y hacer en la Quebrada de Humahuaca

Quedarse asombrado delante del Cierro de los 7 colores en Purmamaca

Purmamarca es un pueblo bastante turístico, pero es muy pintoresco, ya que como fondo tiene el famoso Cerro de los Siete Colores, una preciosidad!!! Una de las cosas que no puedes dejar de hacer en la Quebrada de Humahuaca es dar unas vueltas por este cerro colorido y verlo desde todos los ángulos. Es una montaña increíblemente bonita con todos estos colores, parece un enorme pastel con diferentes cremas.

Merece también la pena subir a un mirador que se encuentra en el otro lado del pueblo, en el cerro Morado. De aquí teníamos una vista del cerro con todos sus colores, una vista inolvidable!

Excursión a Tilcara y la Garganta del Diablo

Tilcara es un pueblo más grande que Purmamarca con calles sin asfalto y muchas casas de barro, un pueblo bonito, aunque a nosotros Purmamarca nos gustó más.

Una de las cosas que hacer en Tilcara es visitar el Pucará de Tilcara que es la ruina de una fortaleza inca. Es un lugar bastante decepcionante porque casi nada es original sino reconstruido y el colmo es que el monumento enorme que levantaron para los arqueólogos tiene la forma de una pirámide maya, nada que ver con la cultura inca.

Sin embargo una bonita excursión es ir hasta la Garganta del Diablo de Tilcara (nada que ver con la Garganta del Diablo en Iguazú) que se encuentra en el fondo de un valle a unos 4 kilómetros del pueblo.

Aquí pudimos ver unas paredes de rocas bastante impresionantes con el río abajo y el sendero sigue hasta una cascada de 14 metros, bastante bonita. Para llegar a la cascada el camino cruzaba muchas veces el río y uno tenía que saltar de piedra en piedra. Aunque la Garganta del Diablo de Tilcara no es como la de Iguazú, nos divertimos mucho aquí. Aquí compartimos una buena parte de la ruta con una pareja argentina que estaba de vacaciones, viajando por el norte de Argentina.

Visitar el alejado pueblo de Iruya

Iruya ha sido de estos lugares que hemos visitado de forma totalmente improvisada, pero que mereció mucho la pena. Nuestro plan original fue visitar Humahuaca y quedarnos allí una noche, pero cuando llegamos a la terminal, justo salía el bus para Iruya que íbamos a visitar el día siguiente.

Una improvisación rápida y ya estábamos yendo para Iruya. El viaje hasta Iruya duró unas tres horas, mayoritariamente por una carretera de ripio que primero sube hasta más de 4000 metros y luego desciende a un valle donde se encuentra el pueblo. El paisaje que se aprecia por la ventana es muy bonito, así aún se puede tolerar la cantidad tremenda de polvo que entra en el bus.

Llegamos al pueblo, había unas chicas jóvenes que ofrecían hospedaje por poco dinero, así nos dirigimos al alojamiento. No hay mucho que hacer en Iruya que es un pueblo tranquilito y bastante más moderno de lo que uno esperaría de un pueblo que se encuentra tan alejado. Considerando la cantidad de hospedajes que vimos, en temporada alta debe haber bastante turistas, ahora, fuera de la temporada , éramos cuatro gatos. Por la noche tuvimos que dar muchas vueltas para encontrar un comedor que estuviese abierto. Aquí cenando conocimos a Candela, una chica muy maja de Buenos Aires.

Al día siguiente desayunamos en la terraza del hospedaje con una vista muy bonita del valle y luego fuimos a dar una vuelta por el pueblo. Las cosas más interesantes que hacer en Iruya sin dudad es visitar el cementerio que muy bonito y al subir al mirador de donde había buenas vistas del pueblo y de las montañas alrededores.

Visitar Humahuaca

Humahuaca es el pueblo que da el nombre a la quebrada, pero es el pueblo que quizás menos nos atrapó. En Humahuaca solo nos quedamos un par de horas antes de tomar el bus para ir a Salta. Entre las cosas que hacer en Iruya (que no parecen ser muchas) nosotros recomendamos un paseo por el centro que tiene una plaza muy agradable y una escalera que sube hasta el monumento de la Independencia. De aquí se podía ver el pueblo desde arriba, es bonito, pero Purmamarca o Iruya nos gustó mucho más.

La Quebrada de Humahuaca es uno de los lugares que conocer en Argentina, no solo por sus hermosos paisajes, sino por sus pueblos en que conocerás una Argentina muy distinta de lo que puedes ver en Buenos Aires o en el sur del país. Aquí la mayor parte de la población es indígena y las costumbres o su forma de ser nos recordó mucho Perú por ejemplo.